“Puedo abrir la puerta a más mujeres”, señaló la nueva trabajadora de Edificios Metálicos, que con su experiencia fabricará grandes estructuras.
La planta de Edificios Metálicos está incrementando sus compromisos de producción y recientemente solicitó una nueva plantilla de soldadores. En ese nuevo grupo llegó Yudith Tovar, cuyo ingreso marcó un hito en esta planta.
Ella aplicó una prueba de selección de dos tipos de soldadura y al revisar la calidad de su trabajo, se incorporó al equipo convirtiéndose en la primera mujer soldadora de Edificios Metálicos.
“Me siento orgullosa porque soy la persona que puede abrir la puerta a más mujeres, de poder ser soldadoras. No es fácil estar aguantando el calor, los ojos. Pero, si los hombres pueden, nosotras también podemos”, dijo Yudith, originaria de Sabinas, Coahuila.
Yudith tiene un año y ocho meses de experiencia soldando. Trabajó en su ciudad natal en una fábrica de vagones para ferrocarriles, donde aprendió este oficio.
Yudith Tovar, primera soldadora en la planta de Edificios Metálicos.
En Edificios Metálicos se fabrican estructuras con grandes dimensiones como lo son las naves industriales. Un ejemplo de ello son las que se hacen para las nuevas líneas en Pesquería, las cuales nacieron de esta planta.
Desde el 12 de agosto, comenzó su capacitación sombra para conocer a la perfección los procedimientos y parámetros de soldadura de su puesto de trabajo y así tener la mejor calidad posible en sus funciones. En su entrenamiento, está fabricando las bases de los rollos para el Laminador en Caliente de Pesquería.
Yudith ya tenía experiencia trabajando con micro alambre, ya que en su antiguo empleo adquirió conocimientos que actualmente está aplicando.
“Me siento orgullosa porque soy la persona que puede abrir la puerta a más mujeres, de poder ser soldadoras".
Las habilidades físicas y de coordinación son importantes para las personas en este trabajo. “Me adapté muy rápido con todo el EPP; he intentado aprender al máximo y poner todo de mí para dejar huella dentro de la empresa”.
“Gracias a Ternium por creer en mí y espero que le den la oportunidad a más mujeres que sepan soldar. Si los hombres pueden, nosotras también. Las puertas de Ternium están abiertas”, expresó.